DECLARACIÓN DE LA COMISIONADA DE TRABAJO, ROBERTA REARDON, SOBRE EL IMPACTO DE LA SENTENCIA DE GEORGE SANTOS

“Siento una gran empatía por lo que han vivido todas las víctimas en esta sala; nadie debería tener que soportar tanto dolor, y la fortaleza de las víctimas hoy es verdaderamente admirable. Estoy aquí como directora del Departamento de Trabajo y Fiduciaria del Fondo Fiduciario del Seguro de Desempleo del Estado de Nueva York, a los cuales el excongresista George Santos defraudó repetidamente durante la pandemia de COVID-19. El Fondo Fiduciario del Seguro de Desempleo es una red de seguridad fundamental para los trabajadores que se encuentran sin empleo por causas ajenas a su voluntad.”

“Durante la pandemia, nuestro Fondo Fiduciario se vio sobrepasado, con más de 1.6 millones de solicitudes de prestaciones procesadas en tan solo las primeras seis semanas de lo que se convirtió en la mayor crisis económica de una generación. El Sr. Santos ha admitido haber obtenido fraudulentamente prestaciones por desempleo en un momento en que millones de neoyorquinos luchaban por llegar a fin de mes. Sus acciones criminales demuestran una cruel indiferencia hacia sus conciudadanos neoyorquinos y sus electores.”

“Es en este contexto que las acciones del Sr. Santos son particularmente atroces. En un momento en que muchos neoyorquinos se encontraban aislados en sus hogares, sin ingresos debido a la pandemia, el Sr. Santos solicitó el subsidio por desempleo sin motivo alguno. Semana tras semana, atestiguaba que no podía trabajar por causas ajenas a su voluntad, mientras ganaba un salario de $120,000. Esto no fue solo un error o un malentendido, sino una decisión consciente de defraudar al sistema, tomada una y otra vez cada vez que recertificaba el subsidio semanal.”

“Durante su campaña, el Sr. Santos engañó a sus electores, diciéndoles que era lo suficientemente confiable como para atender sus necesidades en Washington. Hizo un juramento de protección y servicio, a sabiendas de que ya explotaba el sistema de seguro de desempleo para su propio beneficio, robándoles directamente de sus bolsillos. Luego, en una acción que solo puede describirse como el colmo de la hipocresía, el Sr. Santos copatrocinó audazmente la “Ley de Protección de los Contribuyentes y las Víctimas del Fraude por Desempleo”, poco después de ser acusado formalmente de fraude por desempleo. En esencia, el Sr. Santos le está diciendo al pueblo estadounidense que debe hacer lo que él dice, no lo que hace.”

“Como servidora pública, sé de primera mano que su traición a la confianza pública tiene un impacto que va mucho más allá de la pérdida financiera inmediata para el Fondo Fiduciario. Sus acciones socavan la confianza pública en nuestras redes de seguridad, en quienes fueron elegidos para representarlos y en la capacidad del gobierno para proteger a las personas cuando más lo necesitan.”

“Su Señoría, como administradora de la confianza pública y los fondos públicos, le imploro que considere la gravedad de las acciones del Sr. Santos. Sus crímenes contra el Fondo Fiduciario no fueron injustos. Tienen un impacto real y tangible en la gente trabajadora del estado de Nueva York. Por lo tanto, insto encarecidamente al tribunal a imponer la pena máxima permitida. Esto enviaría un mensaje claro de que no se tolerará la explotación de nuestras redes de seguridad social, especialmente por parte de los servidores públicos.”